Pedir comida a domicilio es un hábito que se ha consolidado a nivel global a raíz especialmente de la creación de aplicaciones y servicios de delivery y los cambios de hábitos derivados de la pandemia. Sin embargo, en mercados como Francia o España, a veces puede entrar en contradicción con otras tradiciones como dedicar tiempo a la cocina casera, elegir los ingredientes con detenimiento, o salir a un restaurante a comer.
De esta idea nace la campaña que Uber Eats Francia puso en marcha el pasado 5 de junio de la mano de la agencia Buzzman. Bajo el concepto ”Ça arrive”, traducido en nuestro idioma a “Ya viene” o “Eso pasa”, la compañía busca posicionarse como un servicio conveniente capaz de entregar a los franceses su comida favorita, sus compras de alimentación y otros artículos.
De esta forma Uber Eats pasa de su posicionamiento centrado en la comida, formulado en el anterior “Let's talk about food” (Hablemos de comida), a un nuevo terreno en el que la marca pretende ofrecer a los clientes la posibilidad de pedir todo lo que necesiten para su día a día en las más de 310 ciudades galas en las que opera. Así, el servicio de delivery busca ser un aliado para compensar la falta de tiempo y energía, o el desgaste mental de los ciudadanos con tan solo un par de clics.
Para ello, la campaña ideada por Buzzman confía en el humor y el desenfado para desdramatizar el acto de pedir a domicilio retratando las pequeñas mentiras empleadas por los usuarios del servicio que se niegan a asumir las facilidades que les brinda la compañía. "No hace falta culpar al perro, fingir que un ex te ha devuelto las cosas o inventar algún talento culinario… “Eso pasa” a (casi) todo el mundo a la hora de hacer un pedido de Uber Eats... Y no hay necesidad de darle mucha importancia", explican desde la agencia aludiendo a lo consumidores atormentado por traicionar determinados hábitos.
Así, la campaña está compuesta por hasta 7 piezas diferentes en las que Uber Eats expone distintas situaciones en clave de comedia. Puede verse a un joven fingiendo que cocina para su madres, cuando en realidad ha hecho un pedido a la compañía; o a un hombre fingiendo que ha sido el perro quien ha solicitado la compra a domicilio. También aparece la anfitriona de una cena que disimula para dar a entender que ha sido ella quien ha cocinado todos los alimentos o a un chico fingiendo ante un interés romántico que un ladrón le ha dejado restos de un pedido.
La campaña ha iniciado con el lanzamiento y difusión de estas piezas audiovisuales tanto en televisión como en plataformas digitales, y continuará con una segunda fase que será implementada a finales del mes de junio con activaciones de publicidad exterior y rede sociales.
