Carlos Alcaraz deslumbra en su primera campaña para Louis Vuitton

Carlos Alcaraz sigue acumulando victorias. Está, por supuesto, la victoria sobre Novak Djokovic en la final de Wimbledon en julio de este año. (Alcaraz dice que "aprende algo de él cada vez que jugamos"). Antes de eso, consiguió la victoria número 100 de su carrera en el Masters de Indian Wells, en marzo. Y entre esos dos hitos del tenis, un triunfo de otro tipo: ser nombrado embajador de la marca Louis Vuitton. No está mal para alguien que acaba de cumplir 20 años.

"Admiro la marca desde hace mucho tiempo", dice Alcaraz de Vuitton, "así que para mí la asociación es un sueño hecho realidad".

Pero, cuando no es la estrella de una campaña de moda, ¿han cambiado los focos la forma de vestir de Alcaraz en la vida real? "Sinceramente, no", dice. "Intento no pensar demasiado en ello. Todavía estoy desarrollando mi sentido del estilismo. Para ello, por supuesto, cuento con mi familia en Louis Vuitton, que siempre está a mano para ayudarme cuando lo necesito". Pocos consejeros va a encontrar mejores.

Y estos días, el deporte que ha dado fama mundial a Alcaraz volverá a ponerlo en el punto de mira. Porque el siguiente paso en este gran verano de triunfos es el Abierto de Estados Unidos, que comienza el 28 de agosto y en el que Carlos defiende la corona que gano el año pasado y que supuso la conquista de su primer grande. Ahora se muestra ilusionado en repetir la hazaña y volver a triunfar en tierras americanas: "Fue increíble ganar mi primer grande en Nueva York", dice. "El público de allí es el mejor. No veo la hora de volver para jugar delante de ellos".