Todo sobre la facturación electrónica

Hoy en día, la facturación electrónica ha pasado de ser una alternativa a una tarea imprescindible para garantizar la productividad y la eficiencia a la hora de gestionar la contabilidad de los negocios. Por ello, es conveniente conocer todo sobre este procedimiento para aprovecharlo al máximo a la hora de aplicarlo.

Tipos de facturación electrónica

Si hablamos de definición, la facturación electrónica hace referencia al mismo concepto que entenderíamos por facturación tradicional, simplemente aplicada en un formato electrónico que garantice su integridad. Podemos identificar dos tipos de formato de factura electrónica:

  1. Estructurada. Se genera automáticamente a partir de un software de facturación, y permite su recepción, también automática, por cualquier sistema informático de contabilidad que posea el receptor. Utiliza un lenguaje XML, y FacturaE es el principal ejemplo en España.
  2. No estructurada. No sigue un formato estandarizado, puesto que son imágenes digitales (generalmente en formato PDF, siendo facturas físicas escaneadas), y requieren de una intervención manual para poder procesarse de forma adecuada.

¿Cómo puedo facturar electrónicamente?

Con las herramientas digitales disponibles en la actualidad, el proceso de facturación es algo extremadamente sencillo, y nos ahorra una gran cantidad de tiempo si lo comparamos con la metodología tradicional. Para ello, solo necesitaremos un software de facturación especializado que genere plantillas para nuestras facturas.

Con ellas, solo tendremos que introducir los datos correspondientes, y el documento se generará de manera automática, pudiendo almacenarse en el propio software, además de descargarse para almacenarlo con comodidad. Actualmente, solo existe la obligación de facturar digitalmente cuando se factura a las administraciones públicas, pero sigue siendo recomendable en todos los casos dada la eficiencia del proceso.

Ley Crea y Crece: cambios y aplicaciones relacionadas con la facturación electrónica

La Ley Crea y Crece (Ley 18/2022, de 28 de septiembre, de Creación y Crecimiento de Empresas) tiene, como objetivo principal, conseguir que la facturación electrónica se implemente en cualquiera de las relaciones comerciales establecidas entre profesionales, independientemente de su sector, con el fin de adelantar la transformación digital de los negocios.

Además, los proveedores de software especializados para la gestión de la contabilidad y la facturación también se ven afectados, puesto que estos deben garantizar la interoperabilidad entre sistemas de forma gratuita, para que todas las gestiones se agilicen y automaticen en cualquiera de los casos.

Esta legislación entrará en vigor el próximo año 2024, en el caso de empresas cuya facturación anual sea superior a los 8 millones de euros. Para el resto de negocios, la obligatoriedad pasará al año 2025, pero se recomienda la implementación de la facturación electrónica, con el fin de adaptarse con anterioridad.

Con esta nueva normativa, la facturación electrónica dejará de ser una alternativa eficiente, para transformarse en un método obligatorio a la hora de gestionar la contabilidad y los procesos de facturación B2B.

Ahora que conoces los principales tipos de factura electrónica y las novedades relacionadas con la legislación que afecta a las mismas, no dudes en empezar a aplicarla en tu negocio y adelantarte a la nueva normativa, especialmente si gran parte de tus facturas se emiten a otras empresas.