Google impone a los editores trabajar con proveedores de consentimiento autorizados

Google ha adoptado una nueva política que exige a los editores con sede en Europa que utilicen sus herramientas de monetización trabajar exclusivamente con plataformas de gestión del consentimiento que cumplan el protocolo de privacidad estandarizado del sector publicitario conocido como Marco de Consentimiento de Transparencia (TCF).

La actualización se aplica a los editores del Espacio Económico Europeo y el Reino Unido -zonas en las que el GDPR exige que los editores y sus socios del ecosistema publicitario observen determinados protocolos de privacidad- que deseen utilizar herramientas como Google AdSense, Ad Manager o AdMob.

Una coalición de empresas del sector de la publicidad en línea liderada por IAB Europe ideó el TCF como medio de cumplir el GDPR, aunque el protocolo no ha estado exento de complicaciones desde que comenzó a aplicarse la legislación hace cinco años (casi una semana).

Peentoo Patel, director de gestión de productos de Google, anunció la actualización a principios de esta semana, especificando que respondía a la finalización del TCF 2.2 y que Google anunciará una lista aprobada de proveedores de CMP en las próximas semanas.