Vitrina internacional para la economía naranja colombiana

Gracias a la gran diversidad de expresiones culturales y creativas, y al trabajo mancomunado de Procolombia y Buró de Convenciones de Bogotá, la capital colombiana albergó por primera vez la edición 2019 de los Winna Awards, que se llevó a cabo el 6 y 7 de junio, evento al que asistieron decenas de agencias, empresarios, anunciantes y medios internacionales de Europa y América.

El WINA – World Independent Advertising Awards – tiene una particularidad y es que es el único festival enfocado a resaltar el trabajo de agencias y redes internacionales independientes; es decir, que no pertenecen a holdings. Además, le apuesta por la democratización de este tipo de reconocimientos al contar con un formato gratuito y un escenario idóneo para la generación de networking con grandes anunciantes, espacio de gran valor para el talento independiente.

El festival, que cuenta con 18 categorías, estuvieron presentes 200 directivos de marketing para que los empresarios publicitarios logren interactuar con ellos en los distintos espacios del festival: Agenda de contactos, Conferencias internacionales, Eppica Sessions, Managers Meeting Constellation, Coctel de Apertura, fiesta de clausura, Feria comercial, festival Kalley de jóvenes talentos y el Golden Ticket Day.

Así mismo, al evento asistió un grupo de jurados, compuesto por importantes figuras mundiales de la publicidad, e invitados especiales, que liderarán charlas sobre los retos y oportunidades de este sector. “Este es un momento único para la industria creativa colombiana y creemos que es un activo sumamente importante para la competitividad el país, más cuando la economía naranja es una de las grandes apuestas por el gobierno. Por tal motivo, queremos contribuir a la internacionalización de ese talento y a que los profesionales se conecten con actores externos, para de esta manera generar oportunidades de exportación de las ideas”, señala Mauricio Rodríguez, gerente de mercadeo de Winna.

El DANE dio a conocer un reporte en el que se establecen las actividades que hacen parte del concepto de la economía naranja, cuyo aporte al país, en 2018, fue de $13.6 billones. Dichas actividades se definen como aquellos sectores que permiten que las ideas se conviertan en bienes y servicios culturales y creativos, que se miden por la propiedad intelectual. Por esto, espacios de reconocimiento, promoción y visibilidad, así como la articulación de los diferentes actores sociales, son claves para incentivar las expresiones culturales y creativas.

El solo hecho de poner sobre la mesa la conversación en torno a la economía naranja es un gran avance. La industria independiente se ha movido de manera orgánica gracias al talento y a la creatividad de los profesionales, pero los que trabajamos en la exportación de servicios profesionales necesitamos de apoyo en términos de incentivos y desarrollo de todo el ecosistema creativo”, concluye Rodríguez.