San Valentín se convierte en un gran impulsor de ventas para las marcas

Desde el comienzo de la pandemia, las restricciones de  movimiento, los aforos reducidos e incluso el miedo al contagio son factores que han alterado,  sin duda alguna, los hábitos de los consumidores acelerando el proceso de digitalización que, si  bien se había iniciado antes de la crisis sanitaria, tras el impacto del COVID, ha llegado para  quedarse.  

El crecimiento que ha experimentado la compra en canales online a lo largo del pasado año es  notorio. Según un estudio realizado por IAB Spain, el 76% de los internautas de entre 16 y 70 años compraron a través de Internet en 2021, lo que supone un aumento del 4% en comparación  con el año anterior.  

Estos datos demuestran que nos encontramos ante un cambio en la estrategia en el punto de  venta y ponen de manifiesto la importancia de dar prioridad a los canales digitales para la  adquisición de tráfico y ventas especialmente en fechas clave como San Valentín.  

La fiesta del amor se ha convertido en un gran impulsor de ventas para las marcas, especialmente aquellas relacionadas con la hostelería, la alimentación, el ocio o los regalos. Y es que, ir a un restaurante, comprar regalos, pedir comida a domicilio, viajar, ir al cine, cocinar  en casa o disfrutar de un espectáculo en directo son, según GWI, las siete principales elecciones  de los consumidores a la hora de celebrar este día señalado. 

Sin embargo, ante tanta competencia, es importante elaborar una buena estrategia que permita  ofrecer la mejor experiencia digital. Por ello, Outbrain, plataforma de recomendaciones en  la open web, ofrece algunos consejos para aprovechar los beneficios de los canales online y conseguir conquistar al consumidor:  

1. Planificar con antelación  

Más del 64% de las búsquedas se concentran en los días previos a San Valentín, según datos  de Google. Por ello, la planificación de la estrategia de marketing se hace esencial para llegar al  usuario de manera efectiva teniendo en cuenta tanto los objetivos de marca, como las tendencias  y preferencias del mercado.  

“La planificación en cuanto a objetivos es crucial; primero, porque permite analizar las  necesidades del potencial consumidor y ofrecerle lo que necesita a través de formatos que  captan su atención y, segundo, porque una buena campaña enfocada a la audiencia idónea  posiciona cualquier producto entre los más visibles y, por tanto, más buscados de Internet”,  explica Victor Colomer, Head of Sales de Outbrain en España.  

Asimismo, es importante tener en cuenta las fases de un customer journey cada vez menos lineal  y más complejo. Trazar una estrategia de contenido para acompañar al consumidor a lo largo de  este proceso nos permitirá guiarle hacia la compra, construir una relación con la audiencia antes  de que se conviertan en clientes; posicionar a la marca como una fuente fiable, segura y útil y  posicionar el producto o servicio de la marca como la solución más adecuada para el consumidor.

2. Enriquecer la experiencia online  

Con el aumento del consumo online, las experiencias digitales cobran cada vez más peso y las  marcas se esfuerzan por replicar en entornos online la experiencia que ofrecen a sus clientes en  superficies físicas. Sin embargo, las posibilidades que ofrece el entorno digital permiten mejorar  la experiencia, enriquecerla y generar un mayor nivel de engagement y awareness. 

Una de las mejores maneras de conseguirlo es a través del contenido personalizado que cada  vez demandan más los usuarios y que, gracias a la tecnología, es más efectivo que nunca para  generar conversión.  

“A la hora de elegir un regalo, la mayoría de las veces, el usuario tiene una cierta idea de qué  producto o servicio busca, pero todavía no ha hecho una elección. Las recomendaciones  personalizadas y relevantes son, por lo tanto, clave en este momento del customer journey para  inclinar la balanza en favor de una marca concreta y fomentar, al mismo tiempo, la compra  espontánea”, señala Victor.

Al mismo tiempo, la publicidad nativa representa una oportunidad ante un consumidor que no  quiere ser interrumpido y que demanda una navegación fluida y orgánica. Las posibilidades de  personalización y variedad de inserción (dentro del feed, dentro de un artículo, en el footer en  forma de recomendaciones, etc.), ofrece a los anunciantes una mayor flexibilidad para dirigirse  a su target de la manera más eficaz. Además, según datos de Outbrain, los anuncios nativos  generan un aumento del 18% en la intención de compra, y generan el mismo engagement que  el del contenido editorial original. 

3. Apostar por formatos interactivos 

Hoy en día, la interactividad es parte imprescindible de la experiencia de marca. En el mundo  digital, este tipo de formatos no solo contribuyen a aumentar el awareness, sino también a  construir reputación y fomentar credibilidad.  

“La interactividad aporta un doble beneficio a las marcas. Por un lado, mejorar sus KPI’s en  términos de CTR, generación de leads, visibilidad, tráfico o reducción del coste por sesión, y al  mismo tiempo permite reforzar el branding, mantener la humanidad de la marca, al conseguir  una mayor resonancia con el consumidor”, explica Victor.

Los beneficios de la interactividad todavía son mayores cuando se integra en el vídeo y es que,  según el estudio “Estudio de Branded Content 2021” de IAB, el vídeo interactivo se percibe como  más creativo y original que el resto de formatos.