Repsol crea una nueva marca en chino mandarín

Repsol ha creado una nueva marca dirigida a los países del área de influencia del chino mandarín: China, Taiwán y Singapur. La compañía tendrá sus propios ideogramas en esta lengua, que en su traducción literal al español significan “Empresa energética inteligente, capaz de anticipar el futuro con espíritu positivo”. Con esta iniciativa, Repsol se adapta a un idioma que hablan más de 1.200 millones de personas, con una marca que ya puede ‘leerse’ en China, Taiwán y Singapur. Será utilizada, por ejemplo, en los envases de los lubricantes de Repsol que diferentes empresas distribuidoras comercializan en China. La compañía ha abordado este proceso como una experiencia de adaptación cultural y de internacionalización, partiendo de la realidad del chino mandarín, un idioma que utiliza miles de caracteres que suman asociaciones de ideas y elementos de significado y de sonido. Ello hace que las marcas propias que no tienen un significado tangible, como Repsol, no tengan traducción posible al chino. Además, una marca, para ser efectiva en este idioma, ha de tener muy pocos símbolos: entre dos y cuatro. Para encarar este proyecto, Repsol se ha basado en su personalidad de marca, es decir, en los valores y atributos que la definen: una empresa global que busca el bienestar de las personas a través del desarrollo de energías inteligentes, inventando el futuro. Además, la compañía quería que esa idea, trasladada a ideogramas, ‘sonase’ también a Repsol. Es decir, que fonéticamente, se pareciera a la marca original. Finalmente, Repsol sonará en Pinyin, el alfabeto fonético chino, como Rui Shuo. A ellos se han añadido otros dos símbolos, que significan empresa energética. En resumen, fonéticamente, Repsol será en China Rui Shuo Neng Yuan. O lo que es lo mismo, leídos los idiogramas en el alfabeto chino, “empresa energética inteligente, capaz de anticipar el futuro con espíritu positivo”.