#Reivindicaelcambio, una campaña de apoyo al comercio, la hostelería y la restauración

Toda España ha protagonizado este lunes un nuevo avance hacia la ‘nueva normalidad’. Madrid, Barcelona y Castilla León han pasado a la Fase 1, mientras que el resto del país comienza a vivir una reducción de las restricciones en la fase 2 de la desescalada. Locales comerciales, establecimientos, bares y tiendas aplauden la vuelta a la actividad, pero se enfrentan a un importante desafío que genera una gran incertidumbre en el desarrollo de sus negocios.

Durante la pandemia el consumo se ha reducido drásticamente lo que ha generado un gran impacto económico a todos los niveles. Por ejemplo, según los datos del INE el comercio minorista registró un descenso histórico de su facturación del 14,3% en marzo respecto al mismo mes de 2019. Ante estos datos es necesaria una reactivación de la economía que permita avanzar hacia la recuperación económica en todo el país. 

En este contexto y para incentivar el consumo y la recuperación de la economía, especialmente en los sectores más afectados, nace la iniciativa #Reivindicaelcambio que anima a reflexionar sobre los cambios que estamos viviendo y reivindica la recuperación de aquellos hábitos y costumbres que forman parte de nuestras vidas y que no han de perderse. El dinero en efectivo es una parte fundamental para el desarrollo de comercios, tiendas, bares y restaurantes y por ello la campaña reivindica el valor que tiene para éstos. El dinero en metálico es un medio de pago completamente seguro, universal y accesible para todos, que juega un importante papel en nuestras vidas como sinónimo de generosidad, aprendizaje, ilusión y esfuerzo.

En #Reivindicaelcambio se recrean situaciones cotidianas en las que el efectivo nos acompaña y el valor que aporta en cada momento. En el vídeo se hace un guiño a la apertura y vuelta a la ‘nueva normalidad’ que los establecimientos están protagonizando estos días y bajo el concepto ‘reivindica la generosidad’ se anima a las personas a contribuir a su recuperación mediante el consumo en las tiendas y comercio de proximidad. También se reivindican otros valores como el aprendizaje, ya que desde nuestra infancia el efectivo nos enseña a dar valor lo que nos rodea y es un mecanismo que a su vez nos ayuda a controlar las finanzas personales, algo especialmente importante en la actualidad. También se muestra la ilusión que trae consigo la recompensa por el esfuerzo y todo lo que podemos hacer gracias a la libertad que aporta el efectivo en todos los ámbitos.

El efectivo y su valor en tiempos de crisis

En tiempos de incertidumbre económica el efectivo históricamente ha tenido un importante valor refugio y así se ha demostrado también en los últimos meses: según el Banco Central Europeo entre el 13 de marzo y el 10 de abril el valor de los billetes en circulación aumentó en 46.689 millones de euros en toda Europa, y cerca de los 5.000 millones de euros corresponderían a España, un 10% aproximadamente.

Además de aportar confianza en periodos de crisis, el efectivo es medio muy valioso para el tejido empresarial. Por ejemplo, los costes soportados por los bancos, la industria minorista y los consumidores son menores cuando el pago se hace en metálico. En cambio, cuando se hace por otro medio, hay que sumar costes en materia de ciberseguridad, amortización de las inversiones en TPV o aplicaciones móviles, entre otros. Tal es así que pagar y cobrar con tarjeta de débito tiene de media un coste 2,8 veces mayor para los consumidores y los comercios que hacerlo en metálico.

También conviene recordar que siendo el único medio de pago universal y accesible para todos y esto es de suma importancia para los colectivos más vulnerables, especialmente para los más mayores, o aquellos que no tienen acceso a medios de pago electrónicos. Tal como se ha manifestado desde el Observatorio Sectorial de la Seguridad Privada, el efectivo un medio de pago fundamental para colectivos más desfavorecidos de la sociedad cuyo nivel de bancarización es muy inferior. En particular, para los más de 3,3 millones de parados que existen en España y, en general, para los 12,3 millones de personas en riesgo de pobreza y exclusión social.

Pagos en efectivo: confianza y seguridad

El dinero en efectivo goza de la confianza de los ciudadanos. Tal es así que, según confirman los datos los datos del Barómetro sobre Hábitos y Percepción de los Ciudadanos respecto al Pago en Efectivo, un 74% de los españoles opta por el efectivo para hacer frente a sus gastos diarios, especialmente para importes de menos de 20 euros, principalmente en tiendas pequeñas o de barrio y hostelería.

En este contexto, y ante la desinformación que se ha producido en torno al contagio a través del contacto con  el dinero en efectivo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recuerda que no se han identificado evidencias de que el coronavirus se contagie a través de un contacto con una superficie artificial. La OMS sugiere que “la enfermedad COVID-19 se transmite principalmente a través de un contacto físico cercano y por residuos respiratorios”. Por lo tanto, la mayor medida de seguridad reside en lavarse las manos y extremar las medidas de higiene, independientemente del método de pago utilizado.