KFC apuesta por la KFCeína por segundo año consecutivo, con un comercial que toma inspiración en las películas románticas de Hollywood. Allí se recrea un paralelismo entre el amor intenso que hace dejarlo todo y un antojo irresistible por una pieza de pollo frito.
Al respecto, Carlos Perk, director creativo de la marca, manifestó que el año pasado tuvieron que introducir un nuevo concepto a las personas: “Por eso optamos por un tono pseudocientífico que nos ayudó a crear la definición de la KFCeína. Pero este año, en vez de dar explicaciones, quisimos hacer que la gente sintiera la desesperación causada por la KFCeína con una historia llena de drama, deseo y mucho foodporn”.
Por su parte, Chany D’Amelio, VP creativo de Ogilvy Miami, comentó: “Se pudo lograr una pieza con un buen balance entre historia y producto. Contamos el amor que se tiene hacia KFC de una manera única, con una linda historia, y con un final para chuparse los dedos”.
