Los marketplaces son el presente del comercio electrónico

Con motivo del Día Mundial de los Derechos del Consumidor que se celebra mañana 15 de marzo, Mangopay, proveedor de soluciones de pago para marketplaces y plataformas de crowdfunding en Europa, ha elaborado una clasificación del tipo de marketplaces y principales claves de éxito por sector. Actualmente hay alrededor de un millón de sitios de comercio electrónico en todo el mundo. De estos, solo el 1,5% son marketplaces, pero generan el 50% del volumen de negocios del comercio electrónico mundial. Esta tendencia va en aumento, ya que Gartner Predict anuncia que este 2022 ese volumen de negocio aumentará hasta el 70%. 

Y es que, tras la pandemia, la digitalización del comercio se ha acelerado de manera espectacular y ha surgido un nuevo perfil de consumidor más exigente, cuyas demandas no quedaban cubiertas por los sitios tradicionales de comercio electrónico. De hecho, según un estudio del partner estratégico de MANGOPAY especializado en marketplaces Mirakl, que analiza las preferencias de los consumidores en materia de comercio electrónico y marketplaces, los consumidores españoles realizan el 39% de sus compras online en marketplaces y, casi la mitad (43%), ha aumentado su uso en el último año.

Actualmente, la popularidad del modelo de marketplace ha generado oportunidades en todo el mundo y en todos los sectores. Así, además de ofrecer un inventario y unos precios atractivos, las plataformas tienen que implantar y gestionar complejos flujos de trabajo de pago y reglamentación y ofrecer una logística y unos métodos de pago eficientes y fiables.

Los tres modelos de negocio más frecuentes para los marketplaces son business to consumer (B2C), consumer-to-consumer (C2C) y business-to-business (B2B).

  • En los marketplaces B2C las empresas venden a personas naturales. Se trata del tipo más habitual de modelo de negocio debido al constante crecimiento del comercio entre empresas y particulares, que ha ido complementando y reemplazando al comercio tradicional.
  • Por su parte, los marketplaces C2C ofrecen principalmente productos de segunda mano, artesanales y servicios personales. Por ello, son un sello distintivo de la creciente economía circular. Impulsados por la pandemia mundial, la creciente preocupación por la sostenibilidad o, simplemente, por necesidad económica, los consumidores han convertido los marketplaces de reventa y de colaboración en un indispensable. Algunas de sus ventajas son la mayor rentabilidad (al no haber intermediarios) y la conexión de los vendedores con una base de clientes más amplia, entre otras. Sin embargo, uno de los principales retos de este tipo de marketplaces es encontrar el modelo de precios adecuado para atraer a compradores y vendedores e implementar medidas de seguridad para proteger a las partes de las estafas.
  • Los marketplaces B2B están pensados para la relación entre empresas. Suelen exigir volúmenes mínimos de compra, por eso no son atractivos para personas físicas. Los marketplaces B2B pueden abarcar desde las plataformas de compra electrónica y de venta al por mayor hasta la logística y los servicios, y las empresas esperan un enfoque personalizado que tenga en cuenta las limitaciones de facturación, los pedidos al por mayor. Suelen ofrecer precios y pagos flexibles, y una atención al cliente muy cuidada.

Según datos de MANGOPAY, los marketplaces B2C y C2C generalistas, en los que se ofrece una gama de productos, representan actualmente el 60% de todos los marketplaces, aunque la tendencia es que los marketplaces B2B vayan ganando cuota de mercado.

Es evidente que los marketplaces ya no son el futuro sino el presente del comercio electrónico y que permiten a los consumidores (ya sean personas físicas u otras empresas) tomar mejores decisiones.