Lacoste presenta su primera colección concebida por un atleta discapacitado

Los grandes atletas se han convertido en algo más que modelos de conducta, son verdaderos iconos que inspiran a las nuevas generaciones. Algunos incluso han visto cómo su nombre se convertía en un logotipo, en una marca. Pero todos ellos tienen algo en común: son atletas sin discapacidad. Ningún atleta discapacitado había tenido nunca este privilegio. Consciente de ello, Lacoste y su agencia BETC han decidido cambiar las cosas.

Lacoste se ha asociado con el nadador tetrapléjico Théo Curin para crear la primera colección con el nombre de un atleta discapacitado, destinada tanto a personas sin discapacidad como a personas con discapacidad.

Théo Curin, Louise Trotter -directora creativa de Lacoste- y sus equipos trabajaron juntos para diseñar un vestuario universal. Desde el logotipo hasta cada una de las piezas, todos los elementos se inspiran en la vida de este extraordinario atleta, en particular en su reciente travesía a nado del lago Titicaca, su última empresa, que marca el punto de partida de esta nueva línea.

"El hecho de que una marca como Lacoste me haya pedido que establezca una colaboración como ésta demuestra que las cosas siguen evolucionando en la dirección correcta. Lo que me ha gustado es que he participado en todas las etapas del diseño: elección de productos, colores, adaptaciones, etc. y también que se trata de una colección universal. Estoy muy orgulloso de ello", dice Théo Curin.

Más allá de los elementos de estilo, se han integrado características especiales en el diseño, como la sustitución de los botones por broches de presión, o los lazos que permiten remangar las mangas con facilidad. Esta atención a los detalles, inspirada en la vida cotidiana de Curin y desarrollada en colaboración con Louise Trotter, facilita el uso de estas prendas a las personas con discapacidad, sin perder el estilo y la elegancia característicos de Lacoste.

Para capturar este proceso creativo, BETC siguió a Théo Curin durante todo un año, desde su preparación para el desafío del Titicaca hasta el diseño de su colección. Esta película de 1m33, llena de emoción y orgullo, es la crónica de esta aventura humana.