El empoderamiento de la mujer no es una moda. Surge de la necesidad de dar visibilidad a una problemática que en muchos ámbitos profesionales, sigue existiendo. Techos de cristal, diferencias salariales, conciliación… son algunos de los principales retos a los que se han enfrentado las mujeres en el entorno laboral a la hora de alcanzar puestos de responsabilidad.
Sin embargo, el sector de la publicidad, el marketing y la comunicación cuenta cada vez con más profesionales mujeres, desde directivas hasta emprendedoras que, a través de esta sección especial que lanzamos dedicadas a ellas, hablan de su experiencia en este sentido. Hoy le toca el turno a María López-Chicheri, Founder at Sioux meet Cyranos. ¡No te la pierdas!
¿Cuáles han sido los principales escollos que ha tenido que superar para llegar hasta su actual puesto de trabajo?
Los escollos a los que yo personalmente me he enfrentado han trascendido al género. Entiendo que cada uno tiene los propios y en función de sus elecciones. Me considero muy dueña de mi propio resultado. Cierto es que no puedo cerrar los ojos a los escollos que he visto en otras mujeres que sí han tenido que ver con el género. Cuando yo empecé hace 20 años en el sector de la publicidad, no me encontré con un sector muy sano, había muchos egos malentendidos y mal gestionados... la gente que trabajaba en este negocio se creía que hacía cosas más importantes que simplemente anuncios. Cuentas era un área muy nutrida de mujeres y creo que entre una mezcla de egos tontos por un lado y algo de falta de consideración hacia cuentas hacía una mezcla explosiva. Ví cosas feas donde yo empecé.
Decir que a una mujer le cuesta más alcanzar un puesto de responsabilidad, ¿es hacer demagogia o es totalmente cierto?
Es cierto al 100%. En la lucha pro mujer no hay demagogia, es una crónica en toda regla. La mujer abarca más y por tanto pierde oportunidades en el foco. Teniendo en cuenta que la sociedad no ayuda a equilibrarlo... la mujer tiende a perder. Llegar a un puesto de responsabilidad para una mujer exige superar más obstáculos que los que tiene el hombre. Hay más renuncias por el camino. Nos toca trabajar en sociedades más sensibles a ser conscientes de esto y por tanto asumir que entre todos debemos equilibrarlo.
Como en todas las crisis, en esta del Covid, ¿vuelven a ser las mujeres el sector más vulnerable?
Hasta que las sociedades no esté madura en cuanto a desigualdades en todos los aspectos, cuando haya crisis siempre sufrirán los mismos. Pero la desigualdad más grande no está en el género... hay alguna que la supera.
¿Ha notado algún tipo de discriminación salarial en los puestos en que ha desarrollado su labor profesional?
Sí, asumida en general. Parece que el hecho de que lideremos la familia a nivel biológico, nos pasa factura. Aún así creo que es un terreno donde se esta avanzando mucho! y creyendo mucho en la mujer por defecto, porque se lo merece, creo sobre todo en la meritocracia. Estamos demostrando un talento que ¡¡¡hay que pagarlo!!!
¿Romper el llamado techo de cristal es posible o solo es un acto reservado a unas pocas?
Lo creo. En la desigualdad en general, y concretamente en la mujer, hay muchas mujeres aún intentando sobrevivir!
En su caso particular, la famosa conciliación familiar, ¿ha sido posible a costa de qué?
A costa de renuncias. Las que yo he elegido afortunadamente. La culpa por no llegar a todo es algo que aún está pendiente. Es un trabajo muy personal; la sociedad puede ayudar pero creo que si en algo debemos aplicar la individualidad es al autoconocimiento, al trabajo en uno mismo. Si uno está bien, logrará contarlo a sus hijos e hijas y la cosa irá cambiando... e iremos deshaciéndonos de la culpa. Está todo en la educación y en el ejemplo.
