El profesional del derecho, Luis Romero, socio director de Luis Romero Asociados y presidente de la Asociación Española de Abigados Penalistas, habla de su profesión, de sus ambiciones y proyectos personales. 

"En 5 años me veo dirigiendo una firma de abogados que estará en el Ranking de Expansión Jurídico"

El profesional del derecho, Luis Romero, socio director de Luis Romero Asociados y presidente de la Asociación Española de Abigados Penalistas, habla de su profesión, de sus ambiciones y proyectos personales. 

Háblanos un poco de ti, ¿cuál ha sido tu trayectoria profesional? ¿qué más facetas desarrolla dentro de su profesión?

Comencé a ejercer como abogado en 1991 y me especialicé en derecho penal y derecho civil. En 1996 éramos dos en el Bufete y hoy somos veinte. Fue decisivo abrir despacho en Madrid en 1998, ya que clientes de toda España nos requieren para defenderlos a lo largo del territorio nacional.

Aparte de ponerme la toga y dirigir el Bufete, imparto clases como profesor de derecho penal y procesal penal en postgrado en la Universidad Carlos III, y en las de Sevilla y Pablo de Olavide, además de en ISDE e ICIDE. También presido la Asociación Española de Abogados Penalistas.

Compaginar su ejercicio del derecho con facetas como la docencia y las asociaciones profesionales, ¿qué le aporta?

Me aporta estar al día en legislación, doctrina y jurisprudencia, así como estar en contacto con los futuros abogados, percibiendo los nuevos horizontes de la profesión. En cuanto a la Asociación, se trata de compartir prioridades para los que somos especialistas en derecho penal y reclamar a las instituciones.

¿Qué es el proyecto Luis Romero abogados? ¿Cómo definirían su actividad profesional?

Nuestro proyecto es llegar a ser la referencia en derecho penal y defensa penal en España. Hay muy pocos bufetes medianos especializados en derecho penal. Nuestra actividad profesional es estar de guardia las 24 horas al servicio de los clientes actuales y potenciales.

¿Cuál es su valor añadido frente a otros despachos de la competencia?

Los abogados que entran a trabajar en el Bufete se quedan para siempre. Somos como una familia, y eso significa que los miembros del Bufete lo dan todo por la firma y sus clientes. Además, no somos sólo abogados: tenemos con nosotros a catedráticos, profesores, exjueces y exfiscales.

¿Cuáles son los principales casos en los que han ofrecido sus servicios legales? 

Podría destacar: Operación Java, Accidente de Ortega Cano, Accidente de Spanair, Nueva Rumasa, Caso Larralde, Caso Ibiza Centro, Asesinato del Abogado Díaz-Moñux, Defensa de los Controladores, Caso Juan Asensio, Operación Biblión, Caso Unión-Operación Jable, Crimen de Almonaster, entre otros.

¿Cómo ha sido la trayectoria entre su bufete y el derecho penal económico ? 

Los casos de delitos económicos ocupan la mitad de nuestros archivos, pero a diferencia de otros bufetes o departamentos de derecho penal, también nos dedicamos al derecho penal general y al derecho penal internacional. En pocas palabras, ejercemos la defensa y la acusación respecto a todos los delitos que recoge nuestro Código Penal.

¿Cuál es su visión del mundo de la abogacía aplicado al mundo de la empresa?

Los abogados somos socios imprescindibles de las empresas. Ya asesoremos como abogados internos o externos, los empresarios deben tenernos a su lado.

Las empresas están adquiriendo cada vez más conciencia de la importancia de prevenir los riesgos penales económicos. ¿Se trata de una buena estrategia empresarial? ¿Se pueden prevenir esos riesgos?

La abogacía preventiva es la mejor abogacía. El corporate compliance es necesario ya por imperativo legal, y todas las empresas deben adaptarse ya para prevenir importantes responsabilidades en el futuro.

Representan a firmas legales norteamericanas en tribunales españoles y trabajan también con empresas que tienen cuestiones legales en esos países, ¿resulta muy diferentes las dos dinámicas judiciales?

Al final, todos los sistemas judiciales de las democracias se asemejan, y las estrategias de defensa penal son muy parecidas. La diferencia es que en los países anglosajones se valora más por el cliente el papel del abogado y asumen presupuestos más altos, pues saben que en la mayoría de los casos significará un ahorro.  

¿Cómo se está adaptando la abogacía a la nueva realidad económica y social?

Lentamente. Los abogados siempre hemos temido a los cambios y nuestra forma de trabajar ha sido tradicional, porque nos gusta centrarnos en el estudio de los casos. Por lo tanto, es fundamental que tengamos proveedores de calidad y especializados en firmas legales, para adaptarnos a los cambios tecnológicos y alas nuevas formas de ejercer la profesión.

Principales retos a los que se enfrentan el mundo del derecho penal económico?

La prevención y el control de la actividad de la empresa y de los empleados, para que la misma se desarrolle en un marco legal y ético. Actualmente, se han criminalizado muchas conductas que hasta hace poco no estaban en la jurisdicción penal sino en la administrativa, laboral o civil y mercantil. Por tanto, hay que invocar el principio de intervención mínima del derecho penal.

Con la reforma del código penal, ¿nuestra legislación actual ofrece seguridad jurídica ante los delitos económicos?

Sí en cuanto al texto legal, no en cuanto a los medios.

¿Cómo afectarán grosso modo estos cambios a las empresas? 

Deberán aumentar sus presupuestos para el corporate compliance y la formación de sus empleados en el ámbito ético y legal.

¿Dónde estará Luis Romero abogado dentro de 5 años?

Impartiendo clases como doctor en derecho penal, escribiendo un libro por año como mínimo y dirigiendo una firma de abogados que estará en el Ranking de Expansión Económico.

En cuanto al derecho a la información, cuestiones como la propiedad intelectual, plagio, el nuevo panorama legal que ofrece internet, ¿cuál es el panorama jurídico de las empresas de comunicación y publicidad?  Retos y amenazas a las que se enfrentan

Los ataques a la propiedad intelectual vienen de todas partes debido a las nuevas tecnologías. Para prevenir daños mayores hay que contar con buenos abogados especialistas y destinar personal interno a la observación y prevención de esos ataques. Los retos son adaptarse a los avances constantes de internet y a llegar a buenos acuerdos con los gigantes, como el que parece que se va a cerrar entre Google y las empresas de comunicación principales en Europa.

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