El impacto del COVID19 ha acelerado la transformación digital de las compañías

Tras más de dos meses de confinamiento, la llegada de una desescalada ha hecho aumentar el consumo fuera del hogar de manera progresiva; estamos conociendo a un consumidor mucho más racional, consciente de los nuevos valores a cuyos hábitos se sigue adaptando la comunicación de las marcas a gran velocidad. Una nueva realidad económica y social en la que juntos nos enfrentaremos a sus retos, sus tendencias y, por supuesto, a un nuevo escenario al que nos tenemos que anticipar en tiempo récord.

La pandemia ha ocasionado un incremento considerable en el consumo de medios y contenidos digitales. Este comportamiento en un entorno digital multiplataforma supone un verdadero reto a la hora de medir el rendimiento de las campañas. Además, nos espera un futuro sin cookies en el que la construcción y explotación del first-party data por parte de anunciantes, publishers y agencias va a ser una necesidad.

De esta manera, HMG han lanzado el último informe sobre la era Covid-19, haciendo un repaso al efecto que ha tenido en nuestro sector y algunas indicaciones de cómo seguir en el camino. El estudo afirma que durante el mes de Junio 2020 se sigue observando un incremento del consumo del medio en el “Brunch Time” vs mayo 2019 (+15%). El consumo de Prime Time vuelve a los niveles en los que se encontraba históricamente. Esto responde a un cambio en los hábitos del consumidor que aún se sigue manteniendo pasado el periodo de cuarentena: Teletrabajo, mayor permanencia en los domicilios.

En cuanto a la comunicación de la campañas, la comunicación de las marca ha evolucionado y se ha adaptado a lo largo de la crisis del Covid-19, pasando desde la incertidumbre inicial a la normalización de la situación actual en la comunicación. Las marcas se han adaptado y han ajustado sus mensajes a la nueva realidad.

Cuando se trata de proporcionar a los consumidores una información online personalizada, relevante y actual, las tecnologías en marketing jugarán un papel clave. Lo mismo se aplica para responder con empatía a un nuevo conjunto de necesidades y restricciones impuestas a los consumidores