El futuro es DataDriven

Daniel Balboa, Head of Data&Programmatic en Mindshare escribe una de las opiniones publicadas en la Guía de Publicidad programática 2020. Su artículo se centra en el DataDriven una de las temáticas que seguro se abordarán en el Foro de Publicidad Programática que La Publicidad celebrará en septiembre.

El pasado mes de noviembre leí una noticia que me llamó la atención “hoy es la fecha exacta en la que transcurría la película Blade Runner”. Miré a mi alrededor y de un vistazo me di cuenta de que no había naves espaciales por la calle y los policías no usaban la mítica pistola “blaster” de dos cañones. Sin embargo, cuando volví la cabeza hacia mi teléfono móvil pude ver cómo en el artículo había una publicidad interesante sobre unas zapatillas de la marca que habitualmente utilizo para salir a correr, además de una notificación en mi buzón de e-mail recordándome que me había dejado el libro de ejercicios de inglés en el carrito de la compra sin haberla llegado a finalizar. Probablemente lo que Ridley Scott no habría imaginado allá por 1982 es que 38 años más tarde sería la era de los datos por encima de los robots o viajes espaciales.

En un escenario (quizás) menos glamuroso que el presentado por las películas de los 80, los datos, son en nuestro tiempo, un valor importante a la hora de facilitarnos nuestro día a día y es algo que desde las agencias dedicadas al marketing tratamos gestionar de la manera más efectiva posible.

Data Driven es un concepto que está en boca de todos en los últimos años y que consiste en la toma de decisiones estratégicas basadas en datos con el objetivo de que las marcas puedan establecer relaciones más cercanas con sus clientes. La dificultad principal, y es aquí donde radica el valor añadido de las agencias, consiste en la gestión del almacenamiento, estructura y análisis de la cantidad ingente de datos de los que disponemos. Esta criba o categorización de la información de más valor es lo que en Mindshare llamamos “Good Data”.

A través de los datos podremos saber desde cómo los clientes navegan por una determinada web, qué compran, qué les gustaría comprar hasta las capacidades de financiación que tienen para adquirir un determinado producto, todo ello basado en información declarativa, privada y anónima. Este conocimiento del cliente nos permitirá presentarle una oferta más personalizada, dirigirnos a el de una forma u otra y modular nuestro mensaje en función de determinadas características. En definitiva, nos permitirá adaptarnos a sus gustos o necesidades ayudando a las marcas a establecer estrategias transaccionales omnicanal. 

Además, gracias al conjunto de datos y tecnologías que nos facilita el entorno programático, podemos ayudar a nuestros anunciantes a dar un paso más y establecer estrategias de captación que nos acerquen, con mayor precisión, a los clientes potenciales, al fin y al cabo, las distintas fuentes de información de las que disponemos nos proporcionan diferentes puntos de vista sobre el comportamiento de los usuarios.

En un futuro diferente al que nos presentaban las películas, ¿podría tener sentido pensar que Marty Mcfly eligió sus famosas zapatillas, en parte, gracias a una estrategia Data Driven?.