El próximo 23 de Junio a partir de las 09.30h, La Publicidad celebrará un nuevo Foro de Branded Content que tendrá lugar en Callao City Lights. Para ir calentando motores, llega la entrevista previa de la mano de Juan Luis Cano, socio de La Maleta Azul. ¡No te lo pierdas!
Con la situación actual, las claves para hacer una buena estrategia de contenido de marca, ¿han cambiado?
Claro que han cambiado. Ahora cualquier contenido hay que crearlo pensando en su transversalidad.
¿Es el Branded Content una forma eficaz de hacer publicidad?
Sí, lo es, por supuesto y cada vez más. El anuncio puro y duro, de mensaje puramente publicitario cada vez es menos digerido por las audiencias en cualquier medio o plataforma. La propia evolución de éstos ha hecho que se perciba la publicidad como algo incómodo y se dice sin reparos: 'Si pagas te quito el petardo de la publicidad', 'Si te haces Premium no tendrás que soportar los mensajes publicitario'. En cambio, el Branded Content consigue que la marca no sea invasiva ni inoportuna, sino todo lo contario. Lo que hay que intentar conseguir es que la audiencia lo perciba como algo que no se le intenta imponer o disimular. Es decir, si es publicidad, es publicidad, no hay que intentar hacerlo pasar por otra cosa, porque el receptor se puede sentir mal al pensar que se le está intentando engañar.
Por lo que respecta a la inversión, ¿se invierte más ahora en este tipo de campañas?
Creo que todavía hay un cierto reparo en alejarse de las fórmulas clásicas y lo que no sé es si la culpa la tienen las marcas, las agencias, los medios o las centrales de medios.
La actual digitalización y el consumo cada vez mayor de redes sociales, ¿cómo está afectando a la forma de hacer campañas de Branded Content tanto para la agencia como para la marca?
A lo que se está tendiendo en todo el mundo, especialmente en EEUU y ya sabemos que suelen marcar tendencia es a que sean las propias marcas las creadoras de contenidos propios. Es decir que ofrezcan al consumidor productos, audiovisuales, que muchas veces ni siquiera tengan que ver con su dedicación, aunque aparezca, evidentemente, en el contenido de manera explícita. Por ejemplo, empresas que ofrecen sus propios reportajes o mini series de ficción.
