Aunque el 2022 parecía ser el año de la reactivación del turismo, los últimos acontecimientos a nivel global han tenido un impacto evidente en las reservas. La guerra de Ucrania, la inflación o la persistencia del coronavirus marcan un contexto de incertidumbre que plantea un gran reto para el sector.
La inquietud por la persistencia del coronavirus y las consecuencias sobre el turismo internacional del contexto bélico actual son motivo de preocupación para el 31% de los consumidores, según una encuesta de GWI. No obstante, la intención de retomar los viajes sigue siendo evidente tras unos años de parón y es que el 49% de los consumidores prevé aumentar su gasto en turismo.
Ante este escenario, las compañías del sector deberán apostar por la flexibilidad en sus estrategias para adaptarse a un escenario volátil y a unas preferencias y expectativas del consumidor cambiantes. Por ello, Outbrain, plataforma de recomendaciones líder en la open web, ofrece las claves que marcarán el rumbo del sector en los próximos meses.
La tendencia hacia el turismo sostenible va en aumento y gana peso en la decisión final de los usuarios. Tanto es así que, según GWI, el 70,1% de los españoles están dispuestos a gastar más en experiencias eco-friendly, situándose muy por encima de otros países europeos como Italia (60,2%) o Alemania (63,6%). Además, el 51% de los viajeros a nivel global señala que las empresas turísticas deben asumir una mayor responsabilidad social y medioambiental en el desarrollo de su actividad.
Sin embargo, a pesar de esta creciente conciencia ecológica, reforzada tras la pandemia, las empresas del sector turístico todavía relegan los aspectos sostenibles a un segundo plano y es que, apenas el 19% de los encuestados por GWI señalan las mejoras en esta área como una prioridad, por detrás de factores como la mejora de la oferta (26%), la atracción y retención del talento (22%) o el ahorro de costes (26%).
