Descubre cómo la tecnología de pagos digitales ayuda a prevenir el robo de datos

La ciberdelincuencia es cada vez más sofisticada y las herramientas de hackeo que circulan son altamente efectivas. Los ciberdelitos son más habituales de lo que uno imagina, y no solo en España, sino también a nivel europeo. Según una encuesta elaborada por la Comisión Europea, los usuarios dicen ser conscientes de este problema, pero no saben cómo mantenerse a salvo en el entorno digital. Por eso, PaynoPain, empresa tecnológica española especializada en el desarrollo de herramientas de pagos online, explica cómo la tecnología es una gran aliada para prevenir los fraudes online relacionados con el robo de datos.

Uno de los delitos más generalizados en el mundo digital español es la estafa, que se manifiesta a través distintas prácticas maliciosas para lograr hacerse con las contraseñas o datos bancarios de los usuarios que navegan y compran por internet. Según el Sistema Estadístico de Criminalidad (SEC), gestionado desde el Ministerio del Interior, del total de ciberdelitos denunciados en 2019 un 88% corresponden a fraudes online. ​​En los últimos nueve años este tipo de denuncias se han multiplicado por nueve, tendencia al alza que se mantuvo en el  2020.

La seguridad como prioridad

Como cibernautas es importante saber que desde el pasado 1 de enero tantos los establecimientos físicos como los online están obligados a aplicar una autenticación reforzada del cliente en los pagos electrónicos, para cumplir con la Directiva Europea de Servicios de Pago (PSD2). La PSD2 fue creada para garantizar la seguridad del consumidor en los pagos electrónicos y minimizar la posibilidad de fraude. Para ello, la norma recoge la obligatoriedad de que los sistemas de pago verifiquen la identidad del usuario mediante, al menos, dos elementos de autenticación que pueden ser: Algo que posee (como, por ejemplo, su propio teléfono móvil), algo que conozca (como un pin o una contraseña) o algo inherente al usuario (como, por ejemplo, su huella digital o su reconocimiento facial). 

¿Cómo puede la tecnología ayudarnos a prevenir el robo de datos? La tokenización, por ejemplo, es una gran aliada para prevenir los fraudes online relacionados con la sustracción de información personal o bancaria. El proceso consiste en “encriptar” datos sensibles para protegerlos, sustituyéndolos por equivalentes conocidos como tokens. Un token en sí no tiene ningún valor o significado, es sólo una referencia o identificador que, gracias al sistema de tokenización, permite volver al dato original. Así, se evita el robo de datos en las transacciones con tarjetas bancarias como compras online u otro tipo de pagos digitales. 

En este sentido, desde PaynoPain desarrollan soluciones, como su pasarela de pagos Paylands, o su aplicación wallet CHANGEiT, en las que la información y los canales de comunicación están cifrados. De esta forma, se garantiza que todos los datos viajan y son almacenados siguiendo las más estrictas normas de seguridad, ayudando a prevenir usos malintencionados. 

A su vez, desde sus distintas herramientas de pago facilitan cumplir con la PSD2  a través de autenticaciones 3D Secure o “pago seguro”, que impiden el uso de datos robados para comprar online, ya que el ciberdelincuente no podrá concretar la doble identificación a la hora confirmar el pago. Además ofrecen soporte PCI, la ya mencionada tokenización de tarjetas y un sistema antifraude inteligente, capaz de identificar las operaciones ilícitas en base a normas de actuación y a la experiencia anterior.