Ikea y un desventurado robot piden a los consumidores británicos que ayuden a salvar el planeta adoptando pequeñas medidas para hacer de la casa un entorno más eco-responsable.
Creado por Mother, la pieza central de "Change a bit for good" es un anuncio de televisión de 60 segundos que muestra a un robot bienintencionado, al estilo de WALL-E, que intenta combatir la contaminación, pero no lo consigue.
En el anuncio, intenta recoger bolsas de plástico esparcidas por la ribera de un río urbano antes de sufrir un cortocircuito y perder el control de los residuos; se enfrenta a un camión que se aproxima a una planta industrial que emite gases, antes de que éste le pase por encima, empapándolo de barro; y aspira los depósitos de petróleo de una playa contaminada, antes de darse cuenta, con desánimo, de que el pequeño frasco de petróleo que ha recuperado apenas supone una diferencia dada la magnitud de la contaminación.
Deprimido, vuelve caminando por las calles de la ciudad, pero se anima al volver a casa con su familia de robots, que están poniendo su granito de arena en el medio ambiente con un cambio de imagen sostenible, por ejemplo, reutilizando un almacén de juguetes para cultivar verduras y utilizando tejidos reciclados.
