Danet pone nombre a las natillas y acaba con las peleas en casa

De la mano de Wunderman Thompson, la marca Danet lanza su nueva campaña “La Última Danet tiene nombre”. La campaña está protagonizada de nuevo por la singular familia que ha aparecido en las últimas comunicaciones de la marca. Formada por una madre, sus tres hijos y su actual pareja. Este año, los miembros de esta familia, unidos en sus desavenencias, siguen tratando de solucionar el conflicto que se genera cuando solo queda una Danet en la nevera y todos la quieren.

En la anterior campaña “La Última Danet. La Serie.”, un psicólogo intentó poner fin a sus peleas tratando la obsesión de cada familiar, pero al persistir su fijación por las Danet, en esta nueva campaña la marca ha decidido asignar, a través del uso de motes, cada natilla a un miembro de la familia. De este modo y con el juego de palabras “La Última Danet Tiene Nombre”, tal como rezan las piezas de la misma campaña, “¡se acabaron las peleas en casa!”.

Una solución personalizada que no se queda solo en la familia Danet sino que busca solventar todas las peleas que puedan surgir en todos los hogares españoles por la última Danet. Así que, la campaña, además de piezas audiovisuales en TV, gráficas en Exterior (Opi) y digital, permitirá a los consumidores encontrar, en todos los puntos de venta, el nuevo pack Danet con más de 100 motes diferentes. Pues no hay casa en el mundo que no haya bautizado con un mote, de forma cariñosa a la vez que puñetera, a los miembros de su familia. Ya sea por el lugar que se ocupa en la familia, (todo el mundo sabe que el pequeño es el Mimao), por el carácter, (¿tal vez seas La Jefa?) o por el comportamiento, (asúmelo, eres el Motivao), tener un apodo (tanto si te gusta como si no) nos permite sentirnos parte de nuestra familia, que, con sus imperfecciones, es única.